Para cumplir con tus proyectos necesitas ser disciplinado. Este un principio básico de alguien que quiere lograr lo que se propone. No importa cuán inteligente, talentoso, creativo o audaz seas, si no eres disciplinado, simplemente no le podrás sacar provecho a las demás virtudes que te ha dado la vida.
Está claro que el dinero es un medio que nos ayuda a poder cumplir con nuestros objetivos, ya sean a corto o largo plazo. Si no sabemos administrar el dinero, no podremos pagar el curso, diplomado, maestría o lo que tengamos planeado.
Se escucha mucho decir, no sé en que se me fue el dinero, o también, el dinero se esfumó, ya no me queda nada; eso quiere decir que existen algunos gastos fantasma, como por ejemplo
Sacar dinero del cajera varias veces, este es un hábito que no permite que llevemos un control de nuestros gastos. La idea muchas veces es sacar poco dinero del cajero para así no gastar todo, sin embargo, es un engaño, ya que al sacar dinero del cajero cada vez que necesitemos comprar o pagar algo, no permitirá que hagamos la medición correcta.
Mucho peor si sacamos dinero en pequeñas cantidades. Nuestro cerebro registra poco dinero y de esa manera, vamos sacando más y más, hasta que nos damos cuenta que ya casi no queda dinero.
Pedir taxi por aplicación muchas veces a la semana. Está bien que busquemos seguridad, pero los taxis que pedimos también deben estar dentro de nuestro presupuesto. Si no sabes cuánto gastarás en taxi al mes, ponle un monto aproximado e intenta ceñirte a ese monto.
Hoy en día, los taxis que se piden por aplicación, permiten insertar tu tarjeta de crédito o débito, de manera que si no cuentas con efectivo, no hay ningún problema, sin embargo es un arma de doble filo, ya que en el momento puede parecer muy cómodo al no pagar dinero en efectivo, porque no sientes el gasto que hiciste.
Lamentablemente la realidad es otra, estás gastando un dinero que no tienes considerado. En cuanto al pago mediante tu tarjeta de crédito, recuerda que el pago de un taxi es un monto pequeño, el cual estaría generando intereses. Este es un gasto fantasma del que debes huir.
Por último, tenemos un gasto fantasma muy común, sobre todo en las personas que se independizaron o viven solas. Te da flojera prepararte algo de comer y pides un delivery. Una vez que empiezas hacerlo, no te das cuenta y ya hiciste un hábito. Este gasto, es más prominente los fines de semana. Considera este tipo de gastos dentro de tu presupuesto y ponlo como un gusto una vez al mes, pero no más.
Lo mejor que puedes hacer, es ir al supermercado y comprar las cosas que vas a necesitar, en el caso de las frutas y verduras, los puedes comprar los fines de semana, pero iría dentro de tu presupuesto como gastos de alimentación.
Que tus gastos fantasmas no te roben tu dinero, todo es cuestión de organización, decisión y sobre todo disciplina.